Razas

Parece cada día más claro que Barba Roja y un servidor están conectados de una manera u otra.Aparte de compartir el timón de nuestro barco, el gusto por la buena música y tantas otras cosas, que al lector ni le interesan ni,seguro,tiene tiempo para leer todas, tenemos ideas que se conectan incluso a kilometros de distancia.

Justo ayer, cuando mi comandante escribió sobre el suceso de los pelirrojos con un fondo antiracista, yo leía un libro del magnífico Kapuscinski en el que narra sus vivencias en África y Ámerica del Sur, estando en las zonas más conflictivas del planeta como correponsal.Entre tanto, cuenta la historia de Sudáfrica.

La mayoría identifica este país como el único africano en el que gobiernan blancos.Pero detrás de está simple afirmación, se esconde un trágica historia llena de muerte, sangre y,ante todo, racismo.

La historia blanca (y roja) de Sudáfrica comienza por el siglo XVII cuando los holandeses colonian esta región.Los que allí llegan tienen una ideología calvinista y feudal, que poco tiempo después fueron abandonados a su suerte por la patria holandesa.
En ese momento, los colonos se convirtieron en sus propios dirigentes, con una mentalidad agraria, esclavista y racista.Curiosamente, este grupo se llama afrikaner.
Los afrikaners creían que Dios había declarado a la raza blanca la buena y a la negra, la mala.De esta manera, el pueblo sudafricano ha vivido guerras, supresiones y desgracias.

En 1981, A.B. Duspresz, gran autoridad de la Iglesia afrikaner e influyente personalidad política, escribía lo siguiente:

"Si algún día hemos de desaparecer del sur de África, si hemos de perecer como Nación Blanca, declaramos en conciencia ante todo el mundo, y en nombre del pueblo afrikaner, que preferimos morir de acuerdo con la voluntad de Dios, que es quién guía nuestro destino, antes de suicidarnos, pues suicidio sería entrar en la asimilación y la integración de los negros. Si los negros logran matarnos y descuartizarnos, el mundo estrá de nuevo ante el triunfo de la barbarie,[...] Preferimos morir obedeciendo a Dios antes que mezclarnos con los negros, perder nuestra identidad y traicionar nuestra vocación divina."

Espero que con este pequeño fragmento entendamos que el racismo sigue hoy en día muy presente en nuestra sociedad (y en casi todas) y que es tarea de todos erradicarla.

Porque las razas se diferencian sólo por los pigmentos de nuestra piel (existen dos tipos de pigmentos: amarillos y negros.Los blancos no tienen apenas, los africanos tienen más negros y los asiaticos tienen más amarillos),no por lo que diga ningún dios (¿alguién ha visto alguno?); por lo demás somos la misma especie, todos somos hermanos.
Acabemos con ésto, concienciarnos de que no hay más diferencia que la ideológica.

Si alguién quiere saber más de la historia sudafricana, les invito a pinchar el siguiente enlace.

http://www.ikuska.com/Africa/Paises/sudafrica.htm

El Manco (RAD)

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